Luke nació en Buenos Aires en 1983. En sus trabajos de diseño e ilustración siempre está presente lo fantástico, la ciencia ficción y cierta oscuridad, ya sea de la mano de Johnny Cash o de monstruos gigantes tratando de destruirnos. Los miedos y neurosis internas son otro tópico común. A veces tierna, otras apocalíptica, su mirada cinematográfica nos muestra un sinfín de historias que van desde lo más pequeño y cercano a la inmensidad de otros mundos.
¿Cuándo empezaste a dibujar?
Creo que es algo de familia… Mi viejo, amante del cine bélico, solía copiar los cómics de Hugo Pratt y Juan Giménez López. Por otro lado, mi hermano dibujaba personajes de películas de esa época, como Rambo y Robocop. A mí también me gustaban y, entonces, lo copiaba a él. Ver esas películas me abría la cabeza, desarrollaba mi imaginación y me motivaba. Dibujar era una manera de vivir esas fantasías.
¿Entre lo digital y lo analógico tenés preferencia?
Me encanta la calidez de lo analógico pero lo asocio con algo más artístico. Habiendo estudiado diseño, le escapo a la pieza única y busco poder reproducirla, con la misma calidad, varias veces. Prefiero lo digital cuando alcanza la sensibilidad que el papel o lo analógico ya tienen de por sí. Cuando logro eso, me quedo con lo digital.
¿Cómo es tu proceso de trabajo?
Arranco a partir de una idea que bosquejo bien chiquitita en lápiz en un cuaderno. Veo si quiero retocar alguna parte de la composición y calco o vuelvo a hacer el trabajo, ya en el formato final, lo más prolijo que pueda. Después, lo escaneo y lo calco en la computadora, para luego pintarlo o vectorizarlo, de acuerdo a lo que quiera hacer.
¿Y si la ilustración no es digital?
Es el mismo proceso pero después de que lo vuelvo a dibujar, lo entinto con estilógrafo o bic negra y lo pinto. Me encanta la bic porque el negro queda potente y la misma herramienta genera un poco de ruido. Hay un momento en que te estresás mucho. sobre todo cuando pensás que le metiste un montón de tiempo al dibujo y que si lo pintaste mal y no te gustó… chau!
Tus ilustraciones tienen algo oscuro…
Bueno, una vez una amiga me dijo “tus dibujos siempre tienen una cuota de sangre”. Y posta, en general tienen cierta agresividad… Cuando arranqué no hacía dibujos aislados sino que trataba de crear una historia, al estilo de los cómics. Y en ellos suele haber acción y violencia… Creo que me quedó de ahí.
También están cargados de mucha expresividad. ¿Cómo la lográs?
Cuando dibujo trato de sentir lo que estoy haciendo. Ya sea que tenga que hacer algo tierno u oscuro. Pero no es que necesito sentirme así para expresarlo, sino que me pongo en ese estado. Es algo que puedo activar, como si estuviera interpretando un papel. Y lo tomo como un laburo; yo quiero que pase algo y hay que hacerlo. Como si fuera el director de una película. Después, para los proyectos personales, acudo a mis neurosis… a lo que me fascina y apasiona.
¿Qué es lo que te llevás de haber participado de “La vuelta al mes en 30 ilustradores”?
Para mí fue un desafío mostrar lo que hacía. A través de “La vuelta” descubrí que muchos de mis miedos eran fantasía… Además, estar rodeado de gente con una calidad de dibujo tan zarpada me motivaba a superarme.
Realizaste varias ilustraciones para la Revista NAN. ¿Cómo hiciste para bajar temas tan complejos como ciberterrorismo y agrotóxicos?
Me dieron un resumen del primer artículo y, a partir de eso, me puse a pensar ideas. Tenía dos días para resolverlo… tuve que volar. Como no se me ocurría nada brillante, lo que hice fue pensar qué me gustaría ver a mí. Para agrotóxicos fue distinto; ya sabía qué quería contar porque había investigado mucho sobre el tema y, además, tenía una semana para hacerlo. Ahí me permití explorar algo con perspectiva… menos plano. Tuve mucha libertad para trabajar.
¿Te contactaron para hacer otros trabajos?
Sí, para hacer una descripción gráfica del clima y los personajes de un proyecto cinematográfico, para el arte de una banda retro-futurista y para un corto sobre el genocidio armenio. Laburando con otras personas me di cuenta que me encanta que opinen sobre mi trabajo. Siento que, al incluir la voz del otro, puedo llegar a algo que solo no podría. Además, como ilustrador, gano herramientas.
¿Qué es para vos el diseño?
Es la unión entre función y estética. Y, al igual que en la ilustración, elegís una forma para comunicar una idea.
¿Tenés el mismo proceso para ilustrar que para diseñar?
No, nada que ver. Con el diseño me encuentro más estructurado, restringido… Empiezo siempre con la imagen. Después aparece el color y luego la tipografía, que es lo que le da personalidad. Con la ilustración siento que tengo más versatilidad.
¿Preferís la ilustración por sobre el diseño?
Cuando ilustro, estoy diseñando. Creo que el diseño nunca se va de tu vida, hagas lo que hagas lo llevás con vos. Antes de la carrera dibujaba siempre de la misma manera… no tenía idea de cómo equilibrar las cosas, crear una atmósfera… Aprendí a componer, a sintetizar, a elegir qué trazo y colores usar en base a lo que quiero contar.
¿Cómo surgió “Postergados”?
Lautaro Pesano se acercó a mí con la idea de crear este grupo en donde el eje fueran afiches críticos y/o de denuncia política. Me sumé al proyecto, ampliando la crítica hacia lo social y lo cultural. Definimos temas más amplios, para que cada integrante pudiera elegir desde dónde hablar sobre ellos. Lauta tenía clara la estructura, el nombre… yo lo que hice fue aportar los integrantes que faltaban. Hice una lista, él seleccionó los primeros cinco de ella y los invité. ¡Lo mejor fue que todos se re coparon con el proyecto!
¿Qué es lo que buscan con este proyecto?
La idea es explorar el formato afiche. Es algo que siempre me gustó pero que tiene su complejidad. No me interesa tanto el resultado al que se vaya a llegar, sino el proceso. Es una oportunidad para investigar y aprender un poco más sobre las diferentes temáticas… y poder compartirlo.
¿Cómo te ves en el futuro?
Me gustaría poder vivir de la ilustración. Tener la posibilidad de trabajar con gente muy grosa, de la cual pueda aprender y así seguir creciendo.
¿Hay algo que quisieras hacer que nunca hiciste?
Siempre me llamó la atención la astrofotografía.
Describite en tres palabras
Analítico, cálido, inquieto.
¿Qué nos recomendarías?
Un director: John Carpenter.
Dibujantes: Mattias Adolfsson, Max Fiumara y Nelson Luty.
Música: Johnny Cash y Toe.