La mediocridad para algunos es normal, la locura es poder ver más allá.
Charly Garcia.
En una mansión antigua de un pueblito perdido en la toscana, ocurre esta historia de vaivenes emocionales y afectivos. Dicha residencia es una institución psiquiátrica para mujeres, donde las internas viven, charlan y trabajan. Allí, Beatrice, una mujer madura con aires de nobleza, conoce a Donatella, un joven que acaba de ser trasladada. Ambas mujeres entablan una ambigua relación de compañerismo y rechazo simultáneo. Donatella tiene un secreto y Beatrice está obsesionada con averiguarlo. La amistad las lleva a escaparse juntas, convirtiéndose en una especie de Thelma y Louise a la italiana.
El viaje es el componente que organiza el relato de forma estructural y a la vez simbólica. En un nivel superficial, es parte de la trama que se cuenta: las dos protagonistas se embarcan –sin querer queriendo– en un recorrido casi vacacional por la toscana. La fotografía del film retrata las maravillas del paisaje italiano como postales. Sin embargo, la belleza turística de este lugar contrasta con lo terrible de la realidad de los personajes. Las mujeres están embarcadas en un viaje catártico que saca a la luz los miedos y secretos más profundos. Esto es el costado más hondo del film: mientras hacen terapia una con la otra a bordo de un auto provocan una conexión emocional con los espectadores.
La locura –más allá de los diagnósticos médicos de cada caso– aparece aquí como la creación de una realidad paralela. Beatrice, por ejemplo, para mantenerse íntegra y fuerte frente a su suerte se convence a sí misma de su riqueza y contactos. Donatella, por su parte, reconstruye su pasado para convertirlo en lo que hubiera querido que fuera. El viaje –y todo lo que conlleva– funciona como un crecimiento personal que desemboca en el primer paso necesario para curarse: la aceptación de la realidad.
El tratamiento de los personajes es impecable al punto de convertirse en lo más hermoso de la película. Sus historias, aunque terribles, no son contadas mediante golpes bajos. “Nací triste, ¡cúrenme!”, esta frase en boca de Donatella, es de una honestidad brutal. Es un personaje completamente vulnerable que se ofrece a su interlocutora, pero también a todos nosotros. Es una súplica que nos pega de lleno, y nos identifica desde lo más profundo. Esta delicadeza para contar la historia es ese componente que provoca la sensación de haber viajado con ellas.
Trailer
Título original: La pazza gioia.
Año: 2016.
País: Italia y Francia.
Director: Paolo Virzi
Guion: Paolo Virzi y Franchesca Archibugi.
Fotografía: Vladan Radovic.
Reparto: Valeria Bruni Tedeschi, y Micaella Ramazzoti.
Productora: Lotus Production, Manny Films, y RAI Cinema.
Duración: 118 minutos.