Recordando al show de Alejandro Molina (2011) de Juan José Campanella y Alejandro Dolina, es una de las obras más completas y mejor realizadas de esta oleada, si bien se trata de una serie televisiva y no de una película. Allí se sintetizan todas estas líneas de metatextualidad sumándose además el desarrollo de una historia compleja, el género musical y fragmentos de reflexiones propias del universo dolinesco.
Otro de los ejemplos de esta nueva ola de humor autorreferencial fue Delirium (2014) de Carlos Kaimakamian Carrau. Allí un grupo de amigos decide, de la noche a la mañana, filmar una película. Más allá de la representación de un proceso de filmación, se apela a utilizar a un actor reconocido como Ricardo Darín haciendo de sí mismo, para mezclar la realidad con la ficción.
En lo que va del año se estrenaron dos películas que se concentran en el mundo del espectáculo para desarrollar sus tramas: Me casé con un boludo de Juan Taratuto, y Permitidos de Ariel Winograd. Ambas apelan a jugar con la relación personaje-actor y a la parodia de los lugares comunes de la farándula.
En el caso de Campaña antiargentina, la historia se cuenta como un falso documental que recuerda films como Zelig (1983) de Woody Allen. El relato se estructura como un juego de mamushkas en donde una historia contiene a otra y todas refieren al propio discurso audiovisual y mediático.El punto de partida es el actor Leo J. (Juan Gil Navarro), quien decide hacer un documental de su vida –al estilo youtuber– para lo cual contrata un camarógrafo que lo sigue en todo momento. Este es uno de los marcos de este relato en el cual aparece otro: el documental producido por él sobre la logia Cisneros y el plan antiargentino.
Si en las cintas antes mencionadas se apelaba al juego entre realidad y ficción o a la relación actor-personaje, aquí se utiliza todo esto y más: historias enmarcadas, personajes tipificados, parodia, intertextualidad, utilización de materiales de archivo, etcétera. A todo este collage mediático, se le agrega la participación especial de figuras famosas como Nancy Dupláa, Adrián Suar y Andy Kuznetzoff, quienes brindan testimonios.
Si bien la idea es interesante –aunque, como vimos, no original– y la realización entretenida, el exceso de elementos que se enmarcan unos a otros, se torna abrumador por momentos. Con todo, la ópera prima de Parysow logra hacer reír sobre todo en su temática y en esa fascinación tan argentina por las teorías conspirativas.
[1] Metadiscurso: discurso (en este caso, película) sobre las normas de funcionamiento del propio discurso o medio.
Trailer
Título original: Campaña antiargentina.
Año: 2016.
País: Argentina.
Director: Alejandro Parysow.
Guión: Alejandro Parysow, Pablo Marchetti y Carlos Perrotti.
Fotografía: Andrei Duran.
Reparto: Juan Gil Navarro, Daniel Melingo, Valeria Correa y Pablo Chao.
Productora: Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA).
Duración: 105 minutos.